Recientemente, un equipo de arqueólogos ha realizado un espectacular
descubrimiento en el río Ródano junto a la puerta de entrada de la
antigua Arelate romana, la actual Arles. Han sacado a la luz un conjunto
de magníficas esculturas en bronce y mármol que había permanecido
escondido bajo las aguas durante más de 2.000 años. Entre las piezas
recuperadas destaca una: un retrato de Julio César, fundador de la
ciudad en el 46 a. C., que probablemente se trate del único retrato que
se conoce de los realizados en vida de César.