Marco d’Agostino, en el año 2001, siendo director del programa de
prospección arqueológica de la laguna de Venecia, localizó a ocho metros
de profundidad un pecio que podía ser una “galea”, el emblemático barco
de la república de Venecia, que controlaba el comercio de lujo desde el
Lejano Oriente hasta el Occidente del mundo. La historia de estas
excepcionales excavaciones, para las cuales se tuvo que vaciar un área
de la laguna, nos permitirá revivir los tres siglos de oro de la
“Serenissima”, del s. XIV en adelante.